Emociones y su calibración
¿Alguna vez te has puesto a
pensar cómo se mide un nivel de conciencia Humana?
¿Cuáles son los parámetros para
decir que tiene una conciencia elevada?
¿Qué tendríamos que hacer para
elevar nuestra conciencia?
Ayer
me encontré con una revelación, algo que cambió en un abrir y cerrar de ojos mi
forma de ver las cosas, me siento de momento ajena y al mismo tiempo parte de
TODO Y TODOS.
En
estas líneas encontré que SI se puede medir la conciencia y no es suficiente
hacer lo correcto, si no también vibrarlas en su máxima expresión, el sostenido
¿por qué? y ¿para qué?
Todo
es parte del libro El Poder contra la Fuerza del Dr. David Hawkins, a quien sin
conocer agradezco infinitamente.
Hoy
les comparto tres emociones medidas a través de la técnica de Kinesiología.
Nivel de Energía 20: Vergüenza
El nivel de vergüenza es peligrosamente cercano a la muerte, a lo cual se puede optar debido a la Vergüenza como un suicidio de la conciencia o más sutilmente elegida ante la frustración de tomar medidas para prolongar la vida “un suicidio pasivo”. La Vergüenza destruye la vida emocional y psicológica y, como consecuencia, baja la auto-estima, dejándolo a uno propenso al desarrollo de enfermedades físicas. Al rebajar el nivel completo de la personalidad, la Vergüenza resulta en una vulnerabilidad ante otras emociones negativas, y por lo tanto, produce orgullo falso, ira y culpa
Nivel de Energía 30: Culpa
La Culpa usada comúnmente en nuestra sociedad para manipular o castigar, se manifiestan por sí misma una variedad de expresiones tales como el remordimiento, la recriminación, el masoquismo y todo la gamma existente de complejos de víctima.
Dominar la culpa conlleva a una preocupación por el “pecado”; una actitud emocional implacable frecuentemente explotada por los demagogos religiosos, los cuales usan la coerción y el control.
Nivel de Energía 50: Apatía
Este nivel es caracterizado por la pobreza, el desespero y la desesperanza. La apatía es un estado de desamparo; sus víctimas, menesterosas en todas sus formas, carecen no sólo de recursos, sino además de la energía para aprovechar lo que está a su disposición.
Este es el nivel de los sin hogar y de los parias de la sociedad; también es la fatalidad de muchas personas mayores y otros que terminan aislados por enfermedades crónicas o progresivas.
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